El síndrome del ojo seco (SOS u ojo seco) es la falta de humedad y lubricación en etapa crónica que afecta la superficie del ojo. Sus consecuencias van desde una irritación menor hasta la incapacidad de usar lentes de contacto y un mayor riesgo de inflamación de la córnea e infecciones oculares.
El ojo seco no mantiene la suficiente lubricación en cuanto a calidad y cantidad afectado principalmente a los adultos.
¿Qué causa el ojo seco?
En el síndrome del ojo seco, las glándulas lacrimales que hidratan el ojo no producen suficientes lágrimas o estas tienen una composición química que hace que se evaporen demasiado rápido.
Dentro de las principales causas tenemos:
- Ciertas enfermedades, como la artritis reumatoide, el síndrome de Sjögren, la enfermedad de la tiroides y el lupus
- Blefaritis (cuando los párpados están hinchados o enrojecidos)
- Entropión (cuando los párpados se vuelven hacia adentro); ectropión (los párpados se vuelven hacia afuera)
- Estar en el humo, el viento o en un clima muy seco
- Mirar la pantalla de un ordenador durante mucho tiempo, leer y otras actividades que reducen el parpadeo
- Uso de lentes de contacto durante mucho tiempo
- Someterse a cirugía ocular refractiva, como LASIK
- Tomar ciertos medicamentos, como: diuréticos para la hipertensión arterial, betabloqueadores para problemas cardíacos o presión arterial alta, medicamentos para alergias y resfriados (antihistamínicos), píldoras para dormir, ansiedad y medicamentos antidepresivos y medicamentos para la acidez estomacal.
- Como parte del proceso natural de envejecimiento, especialmente entre las mujeres mayores de 40 años
- Como efecto secundario de muchos medicamentos, como antihistamínicos, antidepresivos, ciertos medicamentos para la presión arterial, medicamentos para el Parkinson y píldoras anticonceptivas.
Dile al oftalmólogo acerca de todos los medicamentos recetados y no recetados que tomas.
El ojo seco también se ha asociado con el cierre incompleto del párpado después de la blefaroplastia, una cirugía estética popular para eliminar los párpados caídos.
Signos y síntomas del ojo seco
La resequedad persistente, la picazón y la sensación de ardor en los ojos son síntomas comunes del síndrome del ojo seco. Estos síntomas son suficientes para que el especialista diagnostique el síndrome del ojo seco. Algunas veces, él o ella pueden querer medir la cantidad de lágrimas en tus ojos. Una tira delgada de papel de filtro colocada en el borde del ojo, llamada prueba de Schirmer, es una forma de medir esto.
Algunas personas con ojos secos también experimentan una “sensación de cuerpo extraño”: la sensación de que algo está en el ojo. Y puede parecer extraño, pero a veces el síndrome del ojo seco puede causar ojos llorosos, porque la sequedad excesiva estimula en exceso la producción del componente lloroso de las lágrimas del ojo.
- Una sensación de picazón o ardor, y una sensación de sequedad, arenilla y dolor en los ojos
- Una sensación como de arena en el ojo
- Mucosidad fibrosa en o alrededor de los ojos.
- Sensibilidad de los ojos al humo o al viento
- Enrojecimiento de los ojos
- Dificultad para mantener los ojos abiertos.
- Fatiga ocular después de la lectura, incluso durante un corto periodo de tiempo
- Visión borrosa, especialmente hacia el final del día
- Sensibilidad a la luz
- Molestias al usar lentes de contacto
- Desgarro
- Visión doble
- Los párpados se pegan cuando se despiertan
Algunas personas encuentran el dolor muy fuerte, y esto puede llevar a la frustración, ansiedad y dificultad para funcionar en la vida diaria.
No dudes en consultar con el especialista si presentas los síntomas antes mencionados.
Las complicaciones pueden incluir un empeoramiento del enrojecimiento de los ojos y la sensibilidad a la luz, aumento del dolor en los ojos y deterioro de la visión.
¿Cómo se diagnostica el ojo seco?
Si tus ojos se sienten secos y de repente te sientes incapaz de ver tan bien como antes, visita a un oftalmólogo de inmediato. Después de describir los síntomas, es probable que te sometas a pruebas que examinen la cantidad de lágrimas en tus ojos, como una lámpara de hendidura, o un biomicroscopio, o un examen de tus lágrimas. Para este examen, el médico utilizará un tinte como la fluoresceína para hacer más visible la película lagrimal en los ojos.
También se puede utilizar una prueba de Schirmer para medir cómo de rápido tus ojos producen lágrimas. Esto pone a prueba el ritmo de producción de lágrimas utilizando una mecha de papel colocada en el borde del párpado. El oftalmólogo también puede remitirte a un especialista. El médico al que te derivarán depende de la causa subyacente de tu afección. Por ejemplo, pueden remitirte a un alergólogo si tienes alergias crónicas.
Cómo se cura el ojo seco
El síndrome del ojo seco es una afección continua que los tratamientos pueden ser incapaces de curar. Sin embargo, los síntomas del ojo seco, incluidos la sequedad, la picazón y el ardor, suelen poder controlarse con éxito.
El oftalmólogo te recomendara lágrimas artificiales, que se encargan de lubricar la superficie del ojo, aliviando molestias, picazón, sequedad, cuerpo extraño. Las gotas recetadas para el ojo seco van un paso más allá: ayudan a aumentar la producción de lágrimas. En algunos casos, el médico también puede prescribir un esteroide para un alivio más inmediato a corto plazo.
Si utilizas lentes de contacto, ten en cuenta que no debes aplicar las lágrimas artificiales durante su uso. Es posible que tenga que quitarte las lentes antes de usar las gotas.
Revisa la etiqueta, pero mejor aún, consulta con tu médico antes de tomar este medicamento.
Para casos más significativos de ojo seco, el oftalmólogo puede recomendar tapones lagrimales. Estos dispositivos diminutos se insertan en los conductos de los párpados para retardar el drenaje de las lágrimas de los ojos, manteniendo así los ojos más húmedos.
Si el ojo seco es causado por la disfunción de las glándulas meibomianas (MGD), el médico puede recomendar compresas calientes y sugerir un procedimiento en el consultorio para limpiar las glándulas bloqueadas y restaurar la función normal.
Los médicos a veces también recomiendan suplementos nutricionales especiales que contienen ciertos ácidos grasos esenciales para la cura del ojo seco.